Cómo eliminar granos, espinillas y acné con láser
Los granos, espinillas y el acné son problemas comunes que afectan a personas de todas las edades.
Aunque suelen asociarse con la adolescencia, muchas personas adultas también los sufren. La buena noticia es que hoy existen tratamientos eficaces como el láser dermatológico, que permite eliminar granos y espinillas de forma segura y profesional.
¿Es lo mismo tener granos, espinillas o acné?
Aunque muchas veces usamos estas palabras como si significaran lo mismo, no son exactamente iguales. Lo que llamamos “grano” puede incluir varios tipos de lesiones cutáneas, y algunas son leves mientras que otras requieren tratamiento especializado. Aquí te explicamos las diferencias:
🔹 Espinillas (comedones): Las espinillas son poros obstruidos por sebo, células muertas o suciedad. Hay dos tipos:
🔹 Pápulas: Son pequeñas elevaciones rojas e inflamadas en la piel, sin pus visible. Indican un acné inflamatorio leve o moderado. Suelen doler al tacto y, si se manipulan, pueden dejar marcas.
🔹 Pústulas (los “granos” clásicos): Parecen pápulas, pero con una punta blanca o amarillenta visible (pus). Son el tipo de grano más reconocible, y aunque son más fáciles de tratar, explotarlas puede dejar cicatrices.
🔹 Nódulos: Lesiones más grandes, duras y profundas. Se forman bajo la piel y son dolorosas al tacto. Suelen ser persistentes y no desaparecen fácilmente sin tratamiento dermatológico o láser. Indican acné moderado a severo.
🔹 Acné quístico: Es la forma más severa del acné. Aparecen quistes grandes, inflamados, con pus en su interior. Pueden unirse formando placas dolorosas y dejar cicatrices profundas. Este tipo de acné requiere atención médica y puede tratarse con láser especializado y, en algunos casos, con tratamiento farmacológico.
Aunque se relacionan, no siempre se tratan igual. Por eso un diagnóstico personalizado es fundamental.
¿Se pueden eliminar los granos, espinillas y el acné con láser?
Sí ✅, y con excelentes resultados. El tratamiento láser ha revolucionado el cuidado de la piel, permitiendo atacar el problema desde el interior y sin necesidad de fármacos agresivos.
El láser actúa directamente sobre las capas profundas de la piel para:
- Eliminar bacterias causantes del acné (como la Propionibacterium acnes).
- Reducir la producción de sebo.
- Calmar la inflamación de los granos activos.
- Cerrar los poros abiertos.
Esto se traduce en una piel más limpia, equilibrada y libre de brotes continuos.
¿Y las marcas y cicatrices del acné? ¿También se eliminan con láser?
Absolutamente ✅. Muchas personas llegan a nosotros ya sin acné activo, pero con marcas rojas, manchas marrones o cicatrices profundas.
El láser en este caso tiene otro enfoque: regenerar la piel y estimular la producción de colágeno, rellenando y suavizando la textura desigual.
Se pueden tratar:
- Marcas pigmentadas (postinflamatorias).
- Marcas rojas o violáceas.
- Cicatrices atróficas (tipo hoyuelos).
- Tono apagado o textura irregular.
Cada tipo de marca requiere una configuración de láser diferente, por eso trabajamos con equipos avanzados y protocolos personalizados.
¿Cómo funciona el tratamiento láser para el acné?
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