Eliminar un tatuaje con láser es hoy en día el método más seguro y eficaz para borrar un tatuaje. Sin embargo, como en cualquier procedimiento estético o dermatológico, pueden aparecer algunos efectos secundarios temporales. Conocerlos y saber cómo prevenirlos es clave para que el tratamiento sea un éxito y la piel se recupere de forma óptima.
El láser actúa emitiendo pulsos de luz de alta energía que fragmentan las partículas de tinta en la piel. Posteriormente, el sistema inmunológico se encarga de eliminarlas de forma natural. Este proceso se realiza en varias sesiones, dependiendo del color, tipo de tinta, profundidad y tamaño del tatuaje.
En MikiTattooKiller usamos el mejor láser que existe a día de hoy, usamos la tecnología Ink Hunter Master y Ink Hunter Master Pro de Laser Light en todos nuestros servicios láser. Actualmente es considerado el mejor equipo y el que cuenta con mayor reconocimiento en la eliminación de tatuajes y manchas cutáneas.

Aunque usamos la tecnología más puntera, nuestra piel piel necesita un tiempo de regeneración entre sesión y sesión, y es en este periodo es cuando pueden aparecer efectos secundarios leves y transitorios.

Después de cada sesión, es normal que la zona tratada se vea enrojecida e inflamada durante las primeras horas o días. Esto se debe a la respuesta natural del cuerpo ante el calor del láser.
Suele desaparecer en 24-72 horas y puede aliviarse aplicando frío local o cremas calmantes recomendadas siempre por nuestro equipo.

Al fragmentarse la tinta, parte del pigmento puede ascender a la superficie, generando pequeñas ampollas o costras. No deben tocarse ni rascarse, ya que forman parte del proceso natural de curación.
Importante mantener la zona limpia y protegida evita infecciones y favorece una correcta cicatrización.

Algunas personas pueden notar hipopigmentación (piel más clara) o hiperpigmentación (piel más oscura) en la zona tratada. Este efecto suele ser temporal y mejora con el paso de las semanas, especialmente si se evita la exposición solar.

Durante los días posteriores, es habitual sentir ligero picor o sequedad en la zona. Mantener la piel bien hidratada y evitar productos irritantes ayudará a minimizar estas molestias.

Después de la sesión, la piel queda más sensible. La exposición directa al sol puede provocar manchas o irritación. Recomendamos evitar el sol durante al menos 15 días y usar siempre protector solar de amplio espectro (SPF 50+).
Un correcto cuidado posterior es fundamental para reducir los efectos secundarios y acelerar la recuperación de la piel. Recomendaciones principales:
Si quieres saber más sobre cuidados postláser te recomendamos nuestro post dónde hablamos al respecto 👉 https://www.mikitattookiller.com/cuidados-posteriores-a-una-sesion-laser-para-eliminar-un-tatuaje/
Aunque los efectos secundarios tras una sesión de láser suelen ser leves y temporales, es importante contactarnos si notas cualquier reacción fuera de lo habitual.
Si aparecen signos de infección (dolor intenso, secreción o mal olor), ampollas grandes o inflamación que no desaparece en pocos días, no dudes en consultarnos. Nuestro equipo evaluará tu caso y te orientará sobre los pasos a seguir para continuar el tratamiento de forma segura.
En MikiTattooKiller somos expertos en eliminación de tatuajes, manchas y microblading con láser, con más de 15 años de experiencia en el sector. Te acompañamos en todo el proceso para asegurar una eliminación eficaz, segura y con resultados visibles desde las primeras sesiones.